Ingredientes (4 personas):
1 kilo de patatas de Cella, medianas
750 gramos de setas variadas (champiñón, níscalo, etc.)
2 cebollas medianas
2 cucharadas de cominos
1 manojo de perejil
Aceite de oliva del Bajo Aragón
Pimienta
Sal
Modo de hacerlo:
Lava bien las patatas, frótalas con un estropajo para eliminar todo rastro de tierra y sécalas. Pártelas por la mitad, a lo largo. Echa dos cucharadas de aceite en una fuente refractaria y repártelo bien por el fondo. Pon las patatas en la fuente con la parte del corte hacia arriba y espolvoréalas con un poquito de sal. Echa sobre cada una un poquito de aceite y reparte encima los cominos. Mete la fuente en el horno precalentado y deja que las patatas se asen a calor medio durante unos 40 minutos o hasta que estén tiernas.
Mientras tanto, pela las cebollas y pícalas. Limpia las setas, córtales las partes terrosas, lávalas y filetealas. Echa cuatro cucharadas de aceite en una sartén bastante grande y acércala al fuego. Cuando esté caliente, rehoga primero las cebollas picadas hasta que se pongan transparentes. Añade luego las setas; deja que se hagan a calor fuerte hasta que pierdan todo el jugo y empiecen a freír. Sazónalas con sal y pimienta a tu gusto. Pica el perejil y agrégaselo.
Sirve las patatas asadas acompañadas de las setas.
1 kilo de patatas de Cella, medianas
750 gramos de setas variadas (champiñón, níscalo, etc.)
2 cebollas medianas
2 cucharadas de cominos
1 manojo de perejil
Aceite de oliva del Bajo Aragón
Pimienta
Sal
Modo de hacerlo:
Lava bien las patatas, frótalas con un estropajo para eliminar todo rastro de tierra y sécalas. Pártelas por la mitad, a lo largo. Echa dos cucharadas de aceite en una fuente refractaria y repártelo bien por el fondo. Pon las patatas en la fuente con la parte del corte hacia arriba y espolvoréalas con un poquito de sal. Echa sobre cada una un poquito de aceite y reparte encima los cominos. Mete la fuente en el horno precalentado y deja que las patatas se asen a calor medio durante unos 40 minutos o hasta que estén tiernas.
Mientras tanto, pela las cebollas y pícalas. Limpia las setas, córtales las partes terrosas, lávalas y filetealas. Echa cuatro cucharadas de aceite en una sartén bastante grande y acércala al fuego. Cuando esté caliente, rehoga primero las cebollas picadas hasta que se pongan transparentes. Añade luego las setas; deja que se hagan a calor fuerte hasta que pierdan todo el jugo y empiecen a freír. Sazónalas con sal y pimienta a tu gusto. Pica el perejil y agrégaselo.
Sirve las patatas asadas acompañadas de las setas.
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